El Pacto Europeo de Migración y Asilo
El Pacto Europeo de Migración y Asilo, aprobado en junio de 2024, entrará en aplicación plena en 2026. Una de sus piezas más relevantes es el Reglamento de Procedimientos de Asilo (Reglamento UE 2024/1348), que sustituirá a la Directiva 2013/32/UE y unificará en todos los Estados miembros los pasos para tramitar las solicitudes de protección internacional.
La pregunta es inevitable: ¿qué significa esto para España y cómo se prepara nuestro país para implementarlo?
Lo que ya se ha hecho en España
Consulta pública del Ministerio del Interior
El Ministerio del Interior ha abierto una consulta pública para recabar aportaciones sobre la adaptación de nuestra normativa al Pacto. En ese documento se reconoce que algunas disposiciones —sobre todo de la Directiva de acogida— deben transponerse a nuestro derecho interno, mientras que los Reglamentos serán de aplicación directa.
Reforma del Reglamento de Extranjería (entrada en vigor en mayo de 2025)
Aunque no afecta directamente al asilo, la reciente reforma del Reglamento de Extranjería muestra que España ya está actualizando su normativa migratoria. Se trata de ajustes que, en parte, buscan acompasar nuestro marco interno con las nuevas reglas europeas.
Reconocimiento de la necesidad de reformar la Ley de Asilo
La Ley 12/2009 de derecho de asilo y protección subsidiaria deberá ser modificada. Entre otros cambios:
- Incorporar el procedimiento fronterizo de hasta 12 semanas.
- Establecer la obligatoriedad de los procedimientos acelerados en ciertos supuestos.
- Ajustar los plazos de recurso a los previstos en el Reglamento (5–10 días en inadmisiones y fronterizos; 2 semanas–1 mes en ordinarios).
Lo que aún falta
No se ha aprobado todavía una reforma de la Ley de Asilo que recoja de forma completa la nueva estructura procesal: la pre-entrevista, la entrevista sustantiva obligatoria, la grabación de entrevistas, los plazos armonizados y demás novedades.
Tampoco hay una declaración oficial clara de que España tenga lista la transposición de estas normas.
En resumen, el marco nacional aún no está alineado con el Reglamento europeo, y los plazos para hacerlo se acortan.
Retos que España deberá afrontar
- Reforma legal compleja. Al ser una ley orgánica, la modificación de la Ley de Asilo exigirá mayoría cualificada en el Parlamento, lo que implica dificultad política y de tiempos.
- Coordinación normativa. Habrá que evitar contradicciones entre la futura reforma de la Ley de Asilo y el Reglamento de Extranjería recién aprobado.
- Control constitucional y europeo. La ampliación del procedimiento de frontera hasta 12 semanas plantea interrogantes respecto a derechos fundamentales, como la libertad personal o el principio de no devolución.
- Refuerzo institucional. La Oficina de Asilo y Refugio y los juzgados deberán disponer de más medios para cumplir con plazos más estrictos.
- Participación europea. La Agencia de Asilo de la Unión Europea tendrá un papel de apoyo, que España deberá articular sin perder competencias nacionales.
Conclusión
A día de hoy, España se encuentra en una fase de preparación. Hay consultas abiertas y reformas parciales ya aprobadas, pero la adaptación integral del Pacto Europeo de Asilo sigue pendiente.
El calendario europeo es claro: en 2026 este nuevo marco será obligatorio. España deberá aprobar en los próximos meses una reforma profunda de la Ley de Asilo y poner en marcha las medidas administrativas y judiciales necesarias.
Lo decisivo será encontrar un equilibrio: cumplir con la exigencia de celeridad que marca Europa sin menoscabar la tutela judicial efectiva ni el respeto a los derechos fundamentales de las personas solicitantes de asilo.